lunes, 9 de diciembre de 2013

RESOLVER PROBLEMAS UN MOTOR DE APRENDIZAJES Y UN OBJETO DE ESTUDIO.

La resolución de un problema puede ser el motor del aprendizaje y su posterior discusión y argumentación el fundamento de la institucionalización de lo aprendido.
 Toda situación didáctica que presente un desafío al alumno y movilice sus conocimientos previos en pos de la adquisición de un conocimiento nuevo representa un problema.
No obstante la resolución de problemas es un procedimiento que se aprende, para ello se necesita: interpretar el texto, diferenciar datos de incógnitas, idear un plan para relacionando datos llegar a la incógnita, identificar la operación que resuelve el problema la hubiere, identificar nuevos datos que aparecen en la medida que se va resolviendo el problema, verificar el valor de verdad de los resultados obtenidos, reformular las estrategias si los resultados no son adecuados....
Tan importante como lograr que el alumno descubra el conocimiento que se desea enseñar es la aplicación y fijación de lo que el alumno ha descubierto. Por ello también la resolución de problemas también forma parte de las instancias de aprendizaje donde se practica y se evalúa el aprendizaje logrado, donde en el mismo tiempo ya no se realizará un problema sino una guía de problemas .
Pero todos sabemos que a muchos alumnos les resulta muy difícil, entender, interpretar, plantear y resolver problemas. Planteemos algunos interrogantes.
 ¿Qué hacemos para que los alumnos aprendan a resolver problemas?
 ¿Damos por supuesto que los alumnos leen los problemas y les vienen ideas?
 ¿Creemos que todos los alumnos que leen el problema entienden lo que tienen que realizar?
¿Enseñamos a nuestros alumnos a leer comprensivamente e  interpretar el  problemas?
¿Sugerimos el uso de dibujos, esquemas u otro tipo de lenguaje gráfico o visualización que ayude a comprender la situación?
¿Si es un problema que se resuelve con cuentas, hemos trabajado el significado de la operación lo suficiente para que el alumno identifique a esa cuenta como un procedimiento válido que le permite resolver el problema?
¿Hemos enseñado a nuestros alumnos a verificar  sus  resultados,  a analizar la coherencia de su respuesta, a tener herramientas de control sobre su accionar matemático?
Es la hora de decidir ¿Nos quedamos con una matemática para algunos pocos, que son los que sin que enseñemos demasiados tienen facilidad para estas cosas o apostamos a una matemática para todos y enseñamos cómo se hace matemática, es decir, las formas de pensar que utilizan estos alumnos que son buenos en matemática, formas de pensar que ni siquiera ellos pueden explicar?
Me pareció muy interesante este recurso para que los niños practiquen la resolución de problemas respetando los pasos que toda resolución de problemas tiene:
Comprender el problema.
Idear un plan de resolución.
Ejecutarlo resolviendo.
Verificar.
La práctica personal permitirá a cada alumno ir descubriendo sobre sus errores los motivos de sus resoluciones erróneas.

http://playtic.es/clavix/index_flash.html

2 comentarios:

  1. Interesante y actual reflexión, en la que no nos cansaremos de insistir, para agrandar el conjunto de profesionales que se integren a un cambio razonable, natural y motivador de las matemáticas, al alcance de todo el alumnado.
    Por si no lo conoces te propongo este enlace.
    https://docs.google.com/file/d/0BxQM5UFMoClDN0NOcmgwamxJMkhMa3UteEFWb1l6THJuWTNr/edit
    También el blog : http://jmuncan53.blogspot.com.es/

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  2. Gracias Manuel por tus valiosos aportes voy a publicar ese material tan interesante que puede ser de utilidad para muchos docentes. Feliz año nuevo.

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